Paz y Bien! En nuestro corazón de ex-alumnas, de consagradas, de profesoras, de colegas en el equipo directivo, aprendimos, compartimos, rezamos, estudiamos, reímos y sufrimos junto al “Señor Oscar”. Su testimonio humilde y cristiano en el ámbito educativo, congregacional y diocesano: viviendo los valores franciscanos-bonlandenses y abierto a la Iglesia Diocesana de Quilmes en la animación de los proyectos y campañas de solidaridad y muchos “etcéteras” más que quedaron grabado en los corazones de muchas y muchos….Hermanas y Laicos …y por sobre todo….en el corazón de DIOS y de NUESTRA SEÑORA DEL SAGRADO CORAZÓN.